Teniendo en cuenta esta definición, intento llevar a cabo mi trabajo. Intentando ver a la persona como un todo.
La esencia es la base material de la vida. Es congénita, la adquirimos en el momento de la concepción y es la sustancia básica que construye nuestro cuerpo; en definitiva lo que somos y lo que nos define como persona.
DOS son las esencias implicadas a lo largo de un tratamiento, de forma natural el cliente y yo tenemos que interactuar para que todo funcione.
Además de todo, todos estamos esenciados por nuestra propia esencia.
Terapias manuales
He finalizado mi formación en OSTEOPATÍA en todas sus ramas estructural, craneal, visceral y pediátrica.
La base de mi trabajo son técnicas manuales, ajustadas a cada paciente derivadas de mi formación en QUIROMASAJE, también a nivel deportivo y con gran insistencia en el estiramiento.
Como herramientas para apoyarme en los tratamientos utilizo Vendaje Neuromuscular y Acupuntura.
Me he formado de la mano de una gran doctora, en Fibromialgia Y Fatiga Crónica, una enfermedad tan a la orden del día que afecta a muchas mujeres y que son muchos los factores que influyen y los que se pueden trabajar.
En cuanto a apoyo nutricional para mis tratamientos tengo formación en Hongos Nutricionales así como en la nueva línea Master Life (apoyo natural para las alergias, digestiones, cansancio... y la infinidad de malestares que proceden de un mal funcionamiento del organismo porque “Los filtros al igual que en un coche, se taponan y se ensucian”).
Finalmente puedo ofrecerte, entusiasmo, alegría y muchas ganas de poder ayudar y transmitir que como base hay que cuidarse, que la enfermedad siempre sale cara y que hay que prevenir para no curar.
La Osteopatía es la ciencia y el arte de diagnosticar y de tratar las disfunciones de movilidad de los tejidos del cuerpo humano, que provocan trastornos y perturban el estado de salud del organismo.
El mayor beneficio que presenta la osteopatía frente a otras terapias manuales es el principio de ‘mínima intervención’. Al contrario de las directrices y patrones de actuación de las terapias normalizadas, la medicina osteopática no busca la intrusión directa en una dolencia para erradicarla, sino que analiza el posible origen y estudia la evolución. Con esta información el profesional puede paliar la dolencia eliminando la causa que la origina, sin técnicas tan invasivas o agresivas (fármacos, aplicación de aparatología fisioterapéutica, etc), fomentando así la capacidad de autocuración del organismo.
Y es que, está demostrada –ante ciertos problemas–, la facultad que posee el cuerpo humano de regenerarse, de auto sanarse, de adaptarse a los mecanismos lesionales y a las agresiones externas: los seres humanos son capaces por sí mismos de cicatrizar sus heridas, cerrar ulceraciones, sanar de procesos gripales eliminando agentes infecciosos, soldar fracturas óseas, ...; la osteopatía, sencillamente, ayuda con sus técnicas a mantener esta virtud.
Debido a su carácter no invasivo, el uso de la osteopatía carece de contraindicaciones, salvo las propias de cualquier otra técnica fisioterapéutica.
La osteopatía se divide en tres grandes grupos: estructural, visceral y craneal.
• Osteopatía estructural: encaminada al conocimiento del sistema musculo esquelético. huesos, músculos y articulaciones, y cómo interactúan para lograr movimientos. Integra también los tejidos blandos, el sistema de fascias y ligamentos.
• Osteopatía visceral: se conoce y trabajan los órganos. Se observa su función y su comportamiento, pudiendo así corregir sus posibles disfunciones.
• Osteopatía craneal: Como su propio nombre indica, está enfocada al conocimiento de la estructura ósea del cráneo y su relación con el sistema nervioso central, y las modificaciones que sufre el organismo a consecuencia de éste (vértigo, migrañas, errores posturales…). Dentro de la estructura del cráneo se incluye la pieza mandibular de gran importancia en el equilibrio corporal.
Son muchas las técnicas utilizadas para el trabajo de la osteopatía.
Por lo general el ciudadano de a pie asocia la osteopatía con las técnicas de Trust o el “crujido de los huesos”; sin embargo es tan solo una opción entre muchas posibles para devolver la normo- movilidad a los tejidos afectados en la lesión.
• La Osteopatía está referenciada como medicina por la Organización Mundial de la Salud (OMS)* En los EEUU, en Canadá, en Australia, en Nueva Zelanda, Suecia, Portugal, Suiza, y en Inglaterra (Osteopaths act 1-7-1993) , la Osteopatía está reconocida y puede ser practicada de manera libre.
• En otros países, no está beneficiada de un estatuto legal pero puede ser practicada sin coacciones.
• En Europa, el camino de la Osteopatía se abrió en 1999 cuando Bélgica está legalizada tanto la profesión como sus estudios. Desde principios de 2002, Francia también ha legalizado la profesión y sus estudios.
• La Osteopatía está todavía en vía de reglamentación en España, a pesar de la votación por el Parlamento Europeo, el 29 de mayo de 1997, de una resolución (Lannoye y Collins) que pide a los países de la Unión Europea comprometerse en un proceso de reconocimiento de las medicinas no convencionales entre las cuales se encuentra la Osteopatía. EN 2010, el Consejo de Colegios de Fisioterapeutas de España reconoció la Osteopatía como un estudio de máster de la carrera de Fisioterapia, pero los profesionales de la Osteopatía quieren un pleno reconocimiento de su disciplina como una profesión independiente dentro del sector de la salud.
Aunque normalmente se compara la osteopatía con la fisioterapia, son dos especialidades totalmente independientes.
La osteopatía está reconocida por la Organización Mundial de la Salud como una medicina alternativa, aunque en España no tiene el mismo reconocimiento que tiene la fisioterapia.
OSTEOPATÍA: Dado sus principios, la osteopatía le otorga una gran importancia a la estructura corporal. Los osteópatas entienden que todos los sistemas del cuerpo humano constituyen un todo perfectamente interconectado. Trabajan sobre esa base para reconstruir la armonía que debe existir en todo el cuerpo, a nivel músculo esquelético, visceral y craneal.
No ve solamente la lesión en la zona de dolor sino que busca más allá.
FISIOTERAPIA: Un fisioterapeuta sigue un plan de tratamiento determinado para cada tipo de lesión y rehabilitación. En muchos casos, este tipo de plan funciona bien, pero hay pacientes que requieren un plan de rehabilitación personalizado.
Los terapeutas físicos pueden apoyar sus terapias con varios tipos de equipos médicos, como aparatos de ultrasonido y otros que puedan aportar distintos tipos de estímulos a las zonas afectadas como frío, calor, luz, etc. Los pacientes que llegan hasta los fisioterapeutas son referidos por los médicos primarios.